Este es el primer artículo de una serie en la que vamos a tratar de explicar el proceso que se sigue para llevar a cabo con éxito una producción, ya sea cinematográfica, de TV o un videojuego, poniendo especial énfasis en el punto de vista del departamento de producción, obviando las cuestiones artísticas y centrando los artículos en los pasos (idea, guión, storyboard, GDD, etc.) que nos permitan llevar nuestra producción a buen puerto. Posteriormente, será el público quien juzgue si ha disfrutado con nuestro producto.
LA IDEA
Ninguna producción, ya sea cinematográfica, de TV o videojuego, comienza sin una idea previa. Esta idea puede provenir de diferentes fuentes, las cuales podemos simplificar en dos, principalmente:
1.- Interna
Las ideas se generan dentro de la propia empresa y, de este modo, pueden coexistir diferentes formas con las que generar nuevas:
- Empleados designados específicamente para este cometido.
- Uno o varios empleados tienen una idea que quieren compartir y la presentan ante un “comité interno”.
- La empresa promueve reuniones periódicas de “brainstorming” entre todos los empleados, buscando diferentes puntos de vista que ayuden a enriquecer el producto final.
2.- Externa
Las ideas provienen de personas ajenas a la empresa:
- Eventos y/o festivales nacionales e internacionales.
- Presentaciones en la empresa por parte de guionistas o diseñadores de videojuegos, previa cita concertada.
En cualquier caso, independientemente de donde provenga la fuente de la idea, quien la presenta debe tener en cuenta una única cosa ¿Quién estará enfrente escuchando su idea?
Esta pregunta es la más importante que debe de responderse a sí mismo un guionista o diseñador de videojuegos, especialmente porque no importa si cree que su idea es la más impactante de los últimos 100 años, o que incluso, tras su presentación, casi todos los que estaban presentes salieron estusiasmados. En este tipo de presentaciones existe una figura clave, y no es otra que la del productor ejecutivo, el cual dará el go/no-go a cualquier propuesta, fundamentalmente en base a:
- Presupuesto
- Tiempo necesario en acometer la producción
- Rentabilidad
y, tras analizar los puntos anteriores, estrategia a corto/medio plazo de la empresa. Por poner dos ejemplos muy sencillos y esclarecedores. Si fueses guionista o diseñador de videojuegos,
- ¿Presentarías Warcraft (película o videojuego) a un estudio indie?
- ¿Y el videojuego Doodle Jump a una empresa como id Software?
De ambos ejemplos se deduce que es imprescindible presentar la idea en el mejor marco posible, es decir, conociendo la capacidad de inversión/financiación de la que dispone la empresa en la que se realiza la presentación. Igual de malo es fallar por exceso que por defecto y, no solo se habrá “disparado una bala al aire”, sino que es posible que el guionista o diseñador de videojuego haya “quemado todos sus barcos” en dicha empresa.
Por otro lado, del segundo ejemplo se desprende que no solo puede se puede cometer un error teniendo en cuenta el aspecto económico, sino también en cuanto a los intereses de la empresa, presentando una idea que choca frontalmente con sus productos desarrollados. Para presentar una idea en estudios de gran recorrido y con una clara estrategia de producto, es imprescindible haber hecho los deberes con anterioridad, adaptando o seleccionando la idea a su filosofía.
Para terminar, os dejo un link que muestra 19 formas distintas de afrontar la búsqueda de ideas. Como podéis ver en el link, hay muchos caminos para llegar a buen puerto pero, desde el punto de vista del productor ejecutivo, sólo hay uno: ser consciente de a quién se está presentando la idea.
Y ahora, tras leer el artículo ¿sabrías identificar al Director y al Productor Ejecutivo en la tira cómica que encabeza este artículo? Es fácil 😉
